A CONTRALUZ.
Observas mi cuerpo a contraluz de la ventana por la que observo como el sol de la mañana se eleva hacía el cielo azul que despierta al día. Sé que me observas y sé que te gusta hacerlo cuando me ves así, a contraluz. Sé que tus ojos estan fijos en mi figura, que resiguen la linea curva de mis caderas y siguen hacía arriba, me giro hacía tí y ahora observas mi cuerpo desnudo que se te ofrece. Veo como te muerdes el labio, como bajo la sábana se eleva una especie de tienda de campaña justo a la altura de tu sexo. Ese que tanto me gusta y tanto me atrae. Por eso avanzo despacio hacía tí, tratando de no romper la magia de este momento. Te incorporas y me recibes con los brazos abiertos. Nuestros labios se unen en un profundo beso. Tus manos recorren mi piel desnuda y las mias apartan la sábana para recorrer también la tuya. Me siento sobre tus piernas, siento tu sexo rozando el nacimiento del mio, estoy excitada, casi tanto como tú. Tus manos se deslizan hasta mis senos y los masajeas despacio, suavemente. Las mias se pierden entre nuestros cuerpos acariciando tu sexo erecto, masajeando el tronco de arriba a abajo. Mis labios besan su oreja, la muerden y se deslizan hasta tu cuello que succiono y chupeteo. Los tuyos tratan de imitarlos sobre mi cuello y mi excitación aumenta. Una de tus manos se mueve hasta mi sexo acariciando mi clítoris. Gimo excitada. Siento tu sexo rozando el mio, pujando por penetrarme y siento como poco a poco lo hace, como entras en mí, haciendome suspirar excitada. Nos abrazamos pegando nuestros cuerpos y empiezo a moverme sobre tí. Tu sexo entra y sale de mí, me penetra, lo siento rozando las paredes de mi sexo, hinchandose dentro de mí y poco a poco mi placer va aumentando en la misma medida que lo hace el tuyo. Gemimos, nos besamos, nos abrazamos. Ese sueño que tantas veces ambos soñamos ahora es una realidad palpable al sentir nuestras pieles ardiendo por este deseo. Empiezo a sentir el placer recorrer mi sexo, y explotar por fin dentro de mí, y unos segundos después también el tuyo estalla. Nos abrazamos con fuerza sintiendo que el sueño se ha cumplido.
3 comentarios
Rinaldo -
Erotikakarenc -
Anónimo -
Quisiera poder besar esa piel, que mi lengua recorriera cada parte de ti, suspirar por estar feliz junto a ti y susurrar en tu oído lo mucho que te deseo, lo mucho que me excitas.
Es como un sueño y parece tan real.